Dos desonocidas a once mil km de distancia dispuestas a traicionar sus textos por

TREINTA DENARIOS

sábado, 18 de junio de 2011

Correr no es de cobardes

Si alguien puede esperar 56 años
con la ingenuidad a cuestas
yo no
no me dormí
no desperté en ningún lugar
llegué a mi casa en ningún estado
la gente se ríe en las caras de otros
y vos te cruzás de brazos
la vida es un total sinsentido
todos igualmente ingratos


cuando yo vea los trenes del este
esas torres deberían caer
dos edificios dorados
que 20 años no es nada
y nos bailamos un tango sin parar