Dos desonocidas a once mil km de distancia dispuestas a traicionar sus textos por

TREINTA DENARIOS

martes, 1 de junio de 2010

ANGUSTIAS ERA LA MADRE DE ESTRAGON

Detente por favor
¡Estaba más vacío que nunca,
se fue aún más vacío sin mi!
Perdí tanto el colectivo…
me lo tengo merecido, sé muy bien a qué hora pasa,
así con todo lo demás.
Deja ya de maquillarme
tus brazos comienzan a moverse muy rápido
ya no queda pintura
ni roja ni carmín.

Ay ay ay ay, canta y no llores
vas a manchar los zapatos
Un toque de rimmel y esa piedra hará reír,
hoy está menos vacía que siempre
quizás alcance para dos.

2 comentarios:

  1. ame esto: "Un toque de rimmel y esa piedra hará reír", de hecho me hizo sonreir.

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